Bienvenidos !
mi nombre es Pol Turull y actualmente estudio el curso de especialización en sommelier en el CETT de Barcelona. Estoy en el segundo y último curso de mis estudios. El próximo Setiembre me mudo a Francia a estudiar su lengua, conocer sus vinos y sus gentes, donde después de un año deseo cursaré estudios de enología y viticultura en la ciudad de Bordeaux. Vengo del Bachillerato Artístico y estuve a punto de estudiar diseño de moda en la Escuela Superior de Diseño ESDI. Sin embargo, mi modo de entender la vida me hizo apartar esa opción.
Hubo un tiempo en el que el trabajo me asfixiaba, y lo único que deseaba era que llegara Domingo para poder tumbarme desnudo con una copa de vino en la mano. Poco a poco las sensaciones que los caldos despertaban en mis sentidos desembocaron un interés que desconocía antes. Quería saber de que era ese olor que recordaba mas no lograba darle nombre, por que algunos vinos eran más suaves que otros más corpulentos... Preguntas que necesitaban respuestas. Hoy, dos años después, he obtenido respuestas y, aún mejor, muchas más preguntas. ¡ Esa es la magia del vino ! Es inmortal e infinito. Nunca morirá un vino que haya seducido tus sentidos y cautivado tu memoria. Nunca serán suficientes los conocimientos adquiridos, pues el vino es cambiante, rumbo a ningún final. La belleza más pura de conocer al vino es la invitación a la humildad, dado que aquellos que creen conocer mucho dejan de ser sabios al cerrar los ojos delante de la búsqueda del saber.
He creado este blog con la intención de transmitir mis sensaciones vividas gracias a los vinos, a los manjares, a las personas con quien los haya compartido y a la música o al sonido que haya estado a mi lado durante ese rato.
Joan Rodríguez Miró fue mi jefe en mi primer trabajo serio. Gracias a el aprendí dedicación, constancia, concentración, implicación, seriedad, a callar, a hablar, a tratar, a entender... y a un sin fin de cosas que no tienen cavida en lista alguna. El me hizo madurar como profesional y como persona. Actualmente Joan es mi amigo y alguien a quien siempre llevaré en el corazón. Gracias Joan.
También quisiera agradecer públicamente todo lo que, sin saberlo, han echo por mi dos personas a quienes, sin conocerlas, respeto profundamente. Se trata de Joan Goméz Pallarès, autor del blog DE VINIS una crónica sobre los vinos y sus comidas, a quién conocí gracias a un artículo a cerca de los vinos Abadengo y Gran Abadengo, este último me había enamorado una semana antes, tanto como el escrito de Joan. Sus comentarios rebosan pasión y emoción.
Y por otro lado al culto a la crítica con criterio de la mano de Estocomo El blog del perfecto gastrolacho donde aparecí leyendo un cuento de hadas que narraba historias sobre tres estrellas ( y no lo digo por las Michelin ), tres hermanos y tres mil millones de aplausos a El Celler de Can Roca. Su reseña me provocó mariposas en el estomago, algo solo al alcance de la chica con un océano en los ojos.
Gracias a todos ellos me subo al carro de escribir, de seguir aprendiendo y de gozar de las amistades, de los rincones y del discreto encanto de las pequeñas cosa de la vida.
Estas líneas han sido escritas al son de Thomas Dybdahl.
